A pesar de la gran variedad de productos que se pueden extraer de las colmenas: miel, cera, polen, propóleos, jalea real… etc., la Sociedad Cooperativa Montemiel centra su producción básicamente en dos de ellos:
y 
Definida la miel como la sustancia natural dulce producida por la abeja Apis mellifera a partir del néctar de plantas o de secreciones de partes vivas de plantas o de secreciones de insectos chupadores presentes en las partes vivas de plantas, que las abejas recolectan, transforman combinándolas con sustancias específicas propias, depositan, deshidratan, almacenan y dejan en colmenas para que madure, estamos ante un producto considerado como el mejor alimento dietético que existe debido a su composición tan completa y ante un magnífico remedio para muchas enfermedades y dolencias.
La miel es un alimento que cumple con todos los requisitos para ser considerado un producto ecológico y natural, y es ahí donde MONTEMIEL vela para que esto se cumpla, comercializando miel pura de abeja, tal y como es recolectada en los apiarios por los apicultores, no siendo sometida a ningún procesado de tipo térmico o químico.
Para ello realizamos un estricto control a la entrada del producto en nuestra Cooperativa, separándola según calidades y realizando análisis individuales de cada bidón de 300 Kg., determinando parámetros como la humedad para evitar fermentaciones anómalas, el H.M.F. (hidroxi-metil-furfural) para ver el grado de envejecimiento de la miel, la acidez, la conductividad eléctrica y la determinación polínica para garantizar su procedencia.
La miel procede del nectar de las flores, sustancia dulce, perfumada y más o menos líquida según vegetal y clima.
Básicamente está compuesta por agua (15-20 %), azúcares (30 % de glucosa y 40 % de fructosa) aunque hay hasta 15 tipos de azúcares diferentes presentes en la miel, ácidos (glucónico principalmente), proteinas, minerales (siendo las mieles oscuras más ricas en ellos que las mieles claras), vitaminas (B y C), enzimas (invertasa, amilasa..etc.)y otros elementos como cenizas y polen.
En cuanto a la cera, se sintetiza a partir de la miel por reducción química de los azúcares necesitando también las proteínas del polen.
La cera es fabricada por las abejas a partir de 8 glándulas cereras situadas en el abdomen (espejos de la cera), está elaborada por obreras jóvenes, a modo de láminas que recogen con las patas traseras y que acercan a la boca para amasarla e incorporar sustancias realizando posteriormente la construcción de los panales colgándose unas de otras a modo de racimo.
Es una sustancia grasa usada para construir los panales realizando una impresionante arquitectura de miles de celdillas perfectamente alineadas y hexaédricas.
La cera se usa ampliamente en la preparación de diversas cremas limpiadoras, pomadas, preparación de moldes para prótesis dentales, fabricación de velas, confección de pulimentos y en múltiples usos médicos y comerciales.
